Carrera profesional

Debut profesional

La temporada siguiente, 98-99, comencé jugando con el filial de tercera división, y entrenando con el primer equipo, recién descendido a segunda división. Estaba en una nube, con 17 años y entrenando por primera vez con una plantilla profesional. A las ordenes de Antonio Maceda, debuté con el primer equipo el 24 de septiembre del 98, en la Copa del Rey, en el estadio Insular ante la UD Las Palmas Fui unos de los destacados del encuentro y una gran satisfacción personal, poder vivir un encuentro “de verdad” por primera vez en mi vida. Aun recuerdo los cánticos del “pio pio” de la afición canaria!. Esa misma semana, dos días después, el 26-9 cumplo un gran objetivo marcado en mi vida, debutar a nivel profesional, en segunda división, en el partido de liga jugado en San Lázaro contra el Osasuna, a los 17 años. Tenía como compañeros a Fabiano, Sion, Mauro, Lekumberri, Passi, Viedma, Nacho, Cabrejo, Toño Castro, Bellido… todo un lujo para mi poder formar parte de ese equipo. Mi primer gol fue en Ipurua contra el Eibar. Más adelante, contra el Hércules en San Lázaro, hacía el segundo.
Como dato curioso, tras una expulsión en Albacete con un partido de sanción, y para que yo pueda jugar el siguiente partido, el club adelanta la jornada próxima del equipo filial contra el Caselas, que se jugaría el sábado a las tres de tarde, para que el domingo a las cinco de la tarde, pudiese jugar el partido en segunda división, ya que así pasaban 24 horas y podía cumplir la sanción con el equipo filial.

Debut internacional

Si ya estaba viviendo en una nube al estar jugando con el primer equipo, no lo iba a ser menos al recibir mi primera llamada internacional, para jugar con la selección española sub-20 (20-01-99). La llamada del seleccionador nacional Iñaki Sáez, fue para mi una gran alegría y una gran sorpresa. Era un torneo, la XXV Copa Internacional del Atlántico, en una isla muy especial para mi, Las Palmas. Otra vez el destino, en menos de un año, me une a la isla canaria para debutar, en este caso con la selección española sub-20. Quedamos campeones tras vencer a EEUU y Alemania. Lo máximo a lo que se puede aspirar con tan solo 19 años recién cumplidos. Eso fue el inicio de lo que a postre seria uno de los momentos más importantes de mi vida futbolística. Allí tuve la ocasión de conocer nuevos jugadores, que hoy en día tenemos muy buenos recuerdos y una gran relación. Aranzubía, Xavi, Yeste, Orbaiz, Marchena, Alex, Casillas, Gabri, Bermudo, Colsa, Varela, Rubén, Couñago…entre otros.  Tras varios entrenamientos con la selección sub -20, sale la lista definitiva (24-3) para el Mundial de Nigeria*, del 1 al 24 de abril.

Volvía a cumplir un doble sueño, jugar un mundial…. y ganarlo. En menos de un año, me había convertido  en jugador profesional y campeón del mundo. Todo sucedió muy rápido, así es el fútbol, tanto para bien, como para mal. Aunque eso no terminaba ahí, todo lo contrario, mi carrera estaba comenzando. Posteriormente, el 28 de septiembre soy convocado con la selección española sub-21, para entrenamientos y partidos clasificatorios para la Eurocopa del 2000 Prácticamente éramos el mismo grupo de jugadores del mundial, a los que se unieron grandes jugadores y amigos como Reina, Fernando Fdez., Vicente, Del Horno, Joaquín…

Fichaje por el RC Celta de Vigo

Vuelvo del sueño del mundial para seguir compitiendo en la liga con mi equipo, el Compos. Tras finalizar una temporada redonda para mi, debut profesional y campeón del mundo sub-20, llega otro momento muy importante para mi carrera. Ese mismo año,  llegan varias ofertas para cambiar de equipo. Con el visto bueno del presidente, José María Caneda, llegamos a un acuerdo, en el verano del 99, con el RC Celta de Vigo, para jugar en Vigo los próximos 5 años. Fue el paso definitivo. Mi sueño de jugar en primera división estaba cerca. Pasaba a formar parte de uno de los mejores equipos de la liga, y posiblemente la mejor época en la historia del club. En mi primera pretemporada, jugué en todos los partidos, ganando los siguientes torneos: Memorial Quinocho (contra el Betis), Trofeo Híspalis (en Sevilla contra el Parma), Trofeo Xacobeo (en Santiago contra el Real Madrid), Trofeo Ciudad de Vigo (contra el Peruggia) y trofeo Teresa Herrera ( A Coruña contra el Deportivo y Boca Juniors). Sabía que la competencia por jugar iba a ser muy dura. Pasaba a tener compañeros top mundial, prácticamente todos internacionales: Djorovic , Karpin, Mostovoi, Revivo, Penev, Gustavo Lopez, Boban, Cáceres, Berizzo, Gudelj, Celades, Juanfran, Cavallero, Pinto, Makelele, Mazinho, Mccarthy, Silvinho… Dirigidos por Víctor Fernández, éramos uno de los equipos que mejor futbol practicaba, no solo en España, sino también en Europa. En la liga luchábamos por entrar en competición europea.

Debut en primera

En febrero del  2000, cumplía el sueño de cualquier niño, jugar en primera división. En el segundo tiempo en el partido Celta-Real Sociedad,  Víctor Fernández me llama mientras calentaba para salir a jugar, substituyendo  Karpin. Un día inolvidable para mí. Fui el jugador más joven del equipo durante años  y al ser prácticamente el único jugador gallego de la plantilla, (con Noguerol y Couñago solo coincidí un año) , hizo que la afición celeste recordara doblemente ese día, por el debut y por la ovación al entrar, nunca lo olvidaré. Siempre he sentido un gran cariño por la afición celeste por su gran trato y apoyo.

Momentos importantes como celeste:

Grandes noches europeas como la del 4-0  a la Juventus de Turín o 7-0 al Benfica en Balaidos, hacían que el equipo fuera inolvidable. Durante gran parte de las temporadas ocupábamos los primeros puestos de la tabla, peleando con el Real Madrid, Barcelona y Deportivo por el primer puesto.  El único pero que se nos podía poner, era no haber ganado ningún titulo, por méritos lo merecíamos. A punto estuvimos en la final de Copa del Rey en junio del 2001, contra el Zaragoza en la Cartuja de Sevilla. Un día triste para todos nosotros donde perdimos una final que empezamos ganando.

Uno de mis mejores recuerdos individuales, fue ese mismo año, en el que recuerdo mi gol en el Nou Camp, al FC Barcelona en la copa de la UEFA. Un momento importante para mi y el celtismo, es haber conseguido por primera vez en la historia, tras varios años rozándola,  la clasificación para la Champions League en la temporada 02-03, con Lotina de entrenador .La temporada siguiente, tuve que tomar una decisión importante en mi carrera profesional. Debido a la falta de partidos con Lotina la temporada anterior, decidí buscar más minutos en otro equipo, el Deportivo Alavés.

Deportivo Alavés:

En la temporada 03-04 firmo por el equipo vasco.  Fue una decisión muy difícil, pero había que tomarla. Tuve que dejar mi casa para disfrutar de minutos. El Alavés era un recién descendido a segunda división. Nuestra meta era el ascenso. Con Pepe Mel como entrenador, disfrute de los minutos que me faltaron en Vigo la última temporada. Estaba contento a nivel individual y habíamos disputado una gran temporada, llegando a semifinales de la Copa del Rey, habiendo eliminado a mi ex equipo, el Celta de Vigo y a la Real Sociedad, pero otra vez el Zaragoza volvió a quitarme el sueño de jugar mi segunda final de copa. Llegamos a la última jornada de liga jugándonos el ascenso. Getafe, Numancia y Levante eran los otros tres candidatos. Por momentos estábamos en puestos de ascenso, jugábamos en Eibar e hicimos nuestro trabajo, ganamos. Pero los otros tres equipos también habían conseguido los tres puntos en la última jornada, así que una gran tristeza ese día para mí, para  mis compañeros y para la ciudad de Vitoria, la cual recuerdo con gran cariño. Ese día podía haber supuesto un cambió grande en mi vida, ya que con el ascenso hubiese jugado en primera división la temporada siguiente, pero no fue así.

Ese mismo año fue clave en mi futuro. Había que tomar decisiones. Tenía la propuesta de renovación del Alavés, pero con el club en el aire; muchos jugadores terminaban contrato, el entrenador no continuaba, el presidente había anunciado su marcha… Total que era complicado tomar una decisión, sobre todo porque mi meta era jugar en primera división. Ese verano (2004), tras no llegar a un acuerdo con ningún club de primera, y haber rechazado varias propuestas de segunda, y con la liga empezada, decido ir a probar suerte en el Recreativo de Huelva.

Recreativo de Huelva:

La temporada (04-05), no fue muy buena para mí. Llegué al equipo con la liga empezada. Jugué los dos primeros partidos cuando llegue. La falta de una pretemporada fue clave. Varias lesiones musculares por la falta de preparación, hicieron que me perdiera un gran numero de partidos y me costase entrar en un equipo consolidado y peleando por el ascenso a primera. Antes de finalizar la temporada, rechazo varias propuestas de equipos de segunda división, por no llegar a un acuerdo. Decisiones importantes que hay que tomar. Finaliza mi contrato en el Recre sin conseguir el ascenso, pero esta vez no fue tan doloroso a nivel colectivo como la temporada anterior. Por diferentes motivos decido no continuar en el club, que tenía otras pretensiones.

Se avecinaba otro verano movido, debido a la incertidumbre de saber cual será mi destino. Mi objetivo era volver a primera división. Consideraba que tenía capacidad suficiente para jugar en esa categoría, pero era un riesgo grande porque los equipos poco a poco se van formando y las posibilidades se reducen, y la falta de asesoramiento en determinados momentos hacía que no tomase las decisiones correctas.

Mi segunda etapa en el deportivo Alavés:

(05-06) Tras un verano difícil, tras no llegar a un acuerdo con equipos de segunda división, me llega la oportunidad de volver al deportivo Alavés, recién ascendido a primera. Dirigido por Dimitri Piterman. Fue una situación atípica. Firme un contrato por una temporada a falta de un día para el cierre del mercado. Solo quedaba una ficha libre. Mi sorpresa fue, cuando el último día de cierre de plazo de mercado, firman a un portero que ocupaba la última ficha, por lo que el presidente decide dejarme sin dorsal hasta el mercado de invierno.  Llegado enero y tras ser últimos en la tabla, el presidente decide reforzar el equipo en los puestos más necesitados y yo no entraba en esos planes. Las limitaciones del mercado invernal hicieron que no fuera posible encontrar un equipo, de mínimo de segunda división. Un duro golpe para mi profesionalmente, ya que esa temporada en blanco, unida con los pocos minutos de la temporada anterior, hacían que cada vez fuese mas difícil seguir en la rueda.

Salida al extranjero

Aris de Salónica

Tras finalizar ese año negro, tenia el optimismo de que saliera algo decente. Lógicamente cuanto más abajo, más posibilidades de encontrar equipo. Ese verano inicie los contactos con el Aris de Salónica griego. Debido al exceso de jugadores en el equipo y a una serie de prioridades en el club, decidimos posponer las negociaciones para diciembre, si habría posibilidad en ese momento. Tenia que buscar un equipo para disfrutar de minutos mientras tanto. La llamada de Josep Clotet, entrenador de Figueras, hizo que me decantara por ir a jugar con él la temporada 06-07. Mi paso en el club fue fugaz. En diciembre, había llegado a un acuerdo con el Aris de Salónica para finalizar ese año y dos temporadas más de contrato. El club ya lo conocía porque jugamos una eliminatoria de la UEFA cuando jugaba en el Celta, siempre me quedo el recuerdo de la afición, que esta vez disfrutaría como local. En Grecia, había vuelto a disfrutar del ambiente del futbol. Llegué con el equipo en la décima posición, y terminamos cuartos, clasificándonos para la copa de la UEFA, tras una gran segunda vuelta.

Temporada en blanco:   En la temporada 07-08, cuando parecía que iba a gozar de una estabilidad deportiva que había perdido durante varios años, al finalizar la temporada volvieron los problemas. En el verano del 2007, rescindo mis dos años de contrato con el Aris por diferencias con el club. Con la pretemporada ya iniciada, de nuevo la búsqueda de un equipo que me satisfaga, se hacia cada día mas complicado. El mercado estaba muy parado y los equipos apenas necesitaban refuerzos. A final de año, decido ir a entrenar con el Bradford City de la league one en Inglaterra. Apenas dos meses para finalizar el campeonato, el club no necesitaba reforzarse, pero yo si entrenar, debido a un año entrenando con el Arosa para mantener el tono físico. La temporada 2008  termina y me la pase en blanco. La realidad es dura, pero hay que mirar para el futuro y no bajar los brazos. No importa, hay que volver a empezar, tengo ganas e ilusión, eso es lo que importa. Revertir la situación no es fácil, pero hay que intentarlo. Muchas veces tu futuro cambia por toma de decisiones o por las indecisiones. Una persona, un entrenador, las circunstancias, las necesidades, muchos factores hacen que la vida de un futbolista cambie. Pero lo más importante de todo eso es el jugador, que nuca debe bajar los brazos  y revertir la situación.

Paso por el Espanyol B

Debido a la mala experiencia de años anteriores a la hora de encontrar un equipo de acuerdo con mis pretensiones, en la temporada 2009, llego a un acuerdo con  RCD Espanyol para jugar en su equipo filial de tercera división, con la meta de conseguir el ascenso, aunque mi meta individual era dar el salto al primer equipo, si la situación y las condiciones lo requerían. Debido a mi inactividad del año anterior, se hacia difícil la situación, pero tenia que empezar de cero y volver a jugar partidos. Ahí, de nuevo a las ordenes de Josep Clotet, disfrute de minutos, quedando campeones de liga con record de puntos y lo más importante, conseguimos el ascenso de categoría. La situación era atípica. Tenía 28 años y no era normal estar en un filial, pero fue una experiencia diferente. No me arrepiento de haber tomado esa decisión. No me importaba la categoría, para mi en ese caso sería lo mismo jugar en tercera que segunda b. Me motivaba el club en el que estaba. Categoría y jugadores contra los que había jugado hasta no hace mucho, se cambiaban en el vestuario de al lado, eran los del primer equipo.  Un año después, compañeros como, Javi Márquez, Víctor Ruiz, Raúl Baena, Javi López… juegan con asiduidad en el primer equipo. Tras un año en el filial, haciendo varios entrenamientos con la primera plantilla (uno se siente extraño y desencuadrado en esa situación, piensas que es el sitio que te correspondería si todo fuera medianamente normal, pero la realidad es otra), no tenia sentido seguir un año más en el club si no fuese en el primer equipo, y las condiciones y la situación no lo requería, por lo que muy agradecido del trato del club, cuerpo técnico y compañeros, abandone el club.

En la temporada 2009-10 sabia que no iba a ser fácil debido a mi trayectoria en los últimos años y al exceso de jugadores en el mercado. Era complicado encontrar un equipo de segunda división y sinceramente en segunda b me costaba mucho aceptar las propuestas, a pesar de que mi situación no estaba para exigir, pero seguía pensando lo mismo, que puedo volver a jugar donde lo había echo antes y decidí no jugar en segunda b, ya que las propuestas que tenia no me motivaban lo suficiente para hacer las maletas. Esta vez he decidido esperar, y tras varios meses entrenando con el Arosa, se inician los contactos con varios equipos en Europa.

Mi fichaje por el Honvéd de Budapest

La única propuesta en firme era la del histórico club húngaro Honvéd de Budapest, el club de Puskas. Su entrenador, el italiano Massimo Morales, me conocía de mi época en el Celta y del Mundial de Nigeria, ya que curiosamente el estaba en la dirección técnica de la selección de Ghana. Estaban en el parón invernal y necesitaban reforzarse ya que el equipo ocupaba la última plaza de la tabla a nueve puntos de la salvación. Tomo la decisión de ir a Hungría. A pesar de todo, es la  primera división de un país, nada que ver con España, pero sigue siendo futbol y primera división. Pienso que es un paso adelante en mi situación actual. Llegue como refuerzo para la banda derecha, en mediocampo. En el primer partido, de la segunda vuelta, en casa, debido a las necesidades del equipo, juego en la posición de mediocentro. Una charla el día anterior con el entrenador, veía con buenos ojos por mis características y condiciones, que jugara en esa posición. Ganamos 4-2 y di el primer gol y marque el último tras un gran partido. A partir de ahí jugué todos los partidos en esa demarcación, nueva para mi pero con un gran rendimiento.

Terminamos la temporada octavos clasificados, siendo el tercer mejor equipo de la segunda vuelta. Fue una buena experiencia, ya que el haber jugado en otra posición diferente a la que venia jugando, lateral, o interior, me abre más el mercado para el futuro. Finaliza la temporada y en el club, tanto presidente como entrenador desean que continúe. Tras varias semanas de negociaciones, y debido a que allí la liga empieza un mes antes, por lo que había que decidirse dejando al lado otras negociaciones, llegamos a un acuerdo para seguir un año más en el club. Decidí que debería quedarme para seguir con mi progresión, y no arriesgarme a cortarla otra vez después de haber completado una gran segunda vuelta.

Temporada actual

Esta temporada 2010-11, sigo en la línea de la temporada anterior, con varios goles y asistencias, y el equipo esta completando una buena primera vuelta, situándonos en los puestos altos de la tabla con opciones a entrar en Europa.